Especial Verano… Cosas a tener en cuenta a la hora de limpiar la barbacoa

18/07/2018

Durante el verano el tiempo acompaña y son muchas las personas que, optan por disfrutar de una buena barbacoa, pero antes de ponerte manos a la obra es esencial que la pongamos a punto. Así que vamos a repasar algunos detalles a tener en cuenta para limpiar una barbacoa y eliminar la grasa antes de volverla a usar, y para que esté en buen estado durante más tiempo.

Especial Verano… Cosas a tener en cuenta a la hora de limpiar la barbacoa 0

Es importante limpiar las barbacoas y eliminar las grasas antes de volverlas a usar y para mantenerlas en buen estado

Lo primero antes de empezar a hacer nada, esperaremos a que esté fría, ya que si se manipularan las cenizas calientes además de existir la posibilidad de quemaduras, también está el riesgo de provocar algún incendio.

Una vez comprobemos que así es, el siguiente paso es retirar las cenizas y restos de carbón usado que puedan haber quedado. Para ello podemos usar un cepillo o una escoba y un recogedor de mano con los que haremos un pequeño montón para poder retirarlo más cómodamente y echarlo en una bolsa de basura, aunque ojo, te recomendamos desecharlo en pequeñas cantidades ya que hacerlo así te ayudará a evitar que se escape el polvo de ceniza y acabe por otras partes.

Especial Verano… Cosas a tener en cuenta a la hora de limpiar la barbacoa 1

Antes de limpiar la barbacoa hay que retirar las cenizas una vez comprobemos que están ya frías.

Tras retirar las cenizas, pasamos a la limpieza de la parrilla de la barbacoa que es la que está en contacto directo con la grasa.

Aquí debemos tener en cuenta distintos aspectos como si puede o no separarse de la barbacoa, o el material del que esté hecha.

Si puede retirarse la rejilla de la barbacoa, facilitará más su limpieza, pero si esto no fuera posible, no pasa nada, cubriremos la base de la barbacoa con papel de periódico y nos pondremos manos a la obra.

Para limpiar la parrilla de la barbacoa necesitaremos un cepillo o estropajo duro, un buen producto de limpieza desengrasante y una esponja.

Con el cepillo o estropajo duro mojado en agua, retiraremos los restos de comida que puedan quedar adheridos en ambos lados. Seguidamente, pulverizaremos las rejillas de la parrilla con el desengrasante para, acabar frotando con la esponja y quitar la suciedad que quede. Si, la parrilla no estuviese manchada con mucha grasa, también podríamos usar un buen jabón lavavajillas para limpiarla.

Una vez hecho esto, solo nos queda, aclarar y embadurnarlas con aceite de oliva para que evite su oxidación.

Y ¡voila! Lista para volver a usar.